Lidiar con una Xbox One que emite un pitido pero no se enciende es extremadamente frustrante. Desafortunadamente, es un problema muy común con el que muchas personas se enfrentan en un momento u otro. Afortunadamente, hay varias soluciones comprobadas que puede probar.
Si su Xbox One no se enciende pero emite un pitido, desconéctelo de la pared, espere 15 segundos y presione y mantenga presionado el botón de encendido durante 5 segundos (mientras la consola aún está desconectada). Vuelva a enchufar su Xbox y luego presione y mantenga presionado el botón de encendido durante 10 segundos.
Ciclo de encendido y restablecimiento parcial de su Xbox One
La solución más fácil y común para una Xbox One que emite un pitido pero no se enciende es un restablecimiento parcial, un ciclo de encendido o una combinación de ambos.
Asegúrese de realizar primero el restablecimiento parcial, ya que este proceso agotará completamente la energía almacenada de la consola.
Reinicio suave
Intente un restablecimiento parcial en su consola para liberar la energía acumulada de los componentes internos.
Esto no afectará sus juegos o aplicaciones almacenados, por lo que no tendrá que preocuparse por volver a descargar o instalar nada después.
Para reiniciar su Xbox One:
- Desconecte el cable de alimentación de la consola del tomacorriente de pared.
- Espere 15 segundos. Presione el botón de encendido una o dos veces mientras la consola está desconectada. Esta acción descargará cualquier energía extra acumulada conservada en los capacitores de la consola.
- Vuelva a enchufar el cable de alimentación de la consola en el tomacorriente de la pared.
- Vuelva a encender la unidad presionando el botón de encendido y vea si su problema se solucionó.
Ciclo de poder
Si el restablecimiento parcial no funcionó, pase directamente a un ciclo de energía. Una vez más, sus juegos y otras aplicaciones no se verán afectados por este proceso.
Para reiniciar tu Xbox One:
- Mientras su Xbox está apagada, mantenga presionado el botón de encendido durante 10 segundos.
- La luz indicadora en el bloque de alimentación eventualmente parpadeará de naranja a blanco.
- Una vez que la luz indicadora se vuelve naranja constante, su Xbox ha entrado en modo de espera.
- Presione el botón de encendido una vez más para sacar su Xbox del modo de espera y encenderla.
Variaciones de los botones de la consola Xbox One
Si las opciones anteriores de reinicio por software y ciclo de encendido no funcionaron para usted, hay algunas otras opciones de reinicio que puede intentar usando varias combinaciones de botones directamente en la consola.
Es probable que el software interno esté atrapado en un bucle que requiere una entrada para ayudar a romperlo. Presionar ciertos botones puede ayudar a hacer precisamente eso y hacer que su consola funcione de nuevo.
Retención de botón triple
Esta solución requiere presionar tres botones a la vez y normalmente se usa para ayudar a restablecer el software interno para romper un ciclo continuo.
Se puede usar con frecuencia si tiene problemas y tampoco afectará sus juegos o aplicaciones almacenados.
- Mantenga presionados los botones de Encendido, Expulsar y Sincronizar todos juntos.
- Mantén presionados los botones durante 10 segundos.
- Después de que hayan pasado 10 segundos, suelte el botón de expulsión.
- Continúe presionando el botón de encendido y sincronización durante 15 segundos adicionales.
- Después de que hayan pasado 15 segundos, suelte los botones de encendido y sincronización.
- Para encender la consola, mantenga presionados los botones de encendido y sincronización por segunda vez hasta que se encienda y comience su proceso de sincronización en la pantalla.
Tocar el botón de expulsión
Esta solución ha sido una solución común en varios foros públicos de Xbox.
Puede parecer inusual, pero ha ayudado a restablecer el software interno y a que la Xbox vuelva a funcionar para una gran cantidad de personas.
- Simplemente toque el botón Expulsar repetidamente 10 veces seguidas.
No necesita tener un disco en la bandeja cuando intente esta opción.
El propósito es obligar al software a concentrarse en una nueva tarea, como expulsar la bandeja del disco. Puede optar por intentar simplemente poner un nuevo disco.
Esto puede ser suficiente para romper el ciclo del software y hacer que los componentes se concentren en una nueva tarea, que es leer el disco que acaba de insertar.
Razones comunes por las que Xbox One no se enciende
Puede haber una variedad de razones por las que su Xbox One no se enciende pero emite un pitido. Cada problema tiene su propia solución única, y algunas soluciones son mucho más fáciles y menos costosas que otras.
Calentamiento excesivo
Es posible que su consola Xbox emita un pitido y no se encienda debido al sobrecalentamiento. Esto puede ser un problema común si deja la consola encendida la mayor parte del tiempo o si la ventilación está bloqueada por el polvo.
Si la Xbox ha estado encendida durante un período de tiempo prolongado, apagarla durante 30 minutos o más dará tiempo a que los componentes internos y el bloque de alimentación se enfríen.
Este breve descanso permitirá que la temperatura de la unidad baje y evitará problemas futuros.
Si las rejillas de ventilación de la consola están bloqueadas por polvo, puede usar aire comprimido o un cepillo suave para desalojar y eliminar la acumulación de polvo. Esto permitirá un mayor flujo de aire y ayudará a prevenir el sobrecalentamiento en el futuro.
Problema con el bloque de alimentación y el cable
Es posible que su Xbox emita un pitido pero no se encienda debido a una fuente de alimentación defectuosa.
Puede ser el propio cable o el bloque de alimentación. Con el tiempo, el consumo de energía de la consola puede estar ejerciendo presión sobre un bloque de alimentación envejecido, lo que hace que la consola emita un pitido pero no obtenga suficiente energía para encenderse por completo.
Esta es normalmente una situación en la que reemplazar el cable y el bloque de alimentación es su mejor opción. Afortunadamente, hay una variedad de fuentes de alimentación de Xbox del mercado de accesorios que puede encontrar en Amazon o directamente desde Xbox.
Puede optar por reemplazar el cable y el bloque juntos, o comenzar reemplazando solo uno antes de pasar al segundo.
Fuente de alimentación interna defectuosa
Si el problema no se debió a la fuente de alimentación externa del cable o bloque de alimentación, la fuente de alimentación interna podría ser la culpable.
Este componente incorporado es una parte vital de la consola, pero a veces puede sobrecalentarse y fallar.
Si bien este componente se puede reemplazar, desafortunadamente es una reparación bastante costosa y deberá ser realizada por un técnico experimentado.
En la mayoría de los casos, para los modelos de Xbox más antiguos, es más rentable comprar una consola diferente.
Humedad en la placa base
La humedad y los dispositivos electrónicos nunca se mezclan. En ocasiones, los componentes internos de una Xbox, como la placa base, pueden acumular humedad debido a un problema con el sistema de refrigeración líquida interna o la acumulación de condensación debido a los cambios de temperatura.
Esto sucede si la Xbox se almacena en una habitación fría y luego se enciende, o si la habitación en la que se usa la consola es inusualmente húmeda.
Independientemente de cómo sucedió, la humedad en una placa base puede causar una amplia gama de problemas, desde negarse a encenderse por completo hasta emitir un pitido pero no encenderse.
Además, la humedad en una placa base puede provocar chispas y cortocircuitos si es lo suficientemente grave.
Hay una variedad de formas de ayudar a secar la consola, que incluyen:
- Gire la consola en ángulo y deje que la humedad gotee.
- Use un secador de pelo en la configuración más fresca para secar los componentes internos
- Deje reposar la Xbox durante 2 o 3 días para permitir que se seque naturalmente por sí sola.
- Use un deshumidificador en la habitación para eliminar la humedad del aire y la consola
Compra una nueva Xbox
Si simplemente no puede hacer que su Xbox One se encienda nuevamente, puede ser hora de comprar una nueva.
En ese caso, considere la posibilidad de volverse totalmente digital con la Xbox más pequeña de la historia, ¡la Xbox Series S!
Conclusión
Si tiene problemas para encender su Xbox One, asegúrese de probar las soluciones de solución de problemas anteriores antes de pasar a la reparación o reemplazo profesional.
La primera opción que debe probar es un restablecimiento parcial y/o un ciclo de encendido. Ambos tienen una alta probabilidad de funcionar para que su Xbox se encienda por completo.
La siguiente opción más sencilla es restablecer el software interno manteniendo presionados ciertos botones de la consola durante un breve período de tiempo.
Si eso no funciona, debe intentar reemplazar el bloque de alimentación, limpiar la rejilla de ventilación para garantizar un enfriamiento adecuado y verificar si hay humedad en la placa base.
Desafortunadamente, si ninguna de las soluciones incluidas aquí funcionó para usted, su última opción puede ser reparar o reemplazar la consola.
¿Qué hiciste para arreglar tu Xbox One? ¡Házmelo saber en la sección de comentarios a continuación!